jueves, 30 de julio de 2009

Raúl Wiener: Garcia se niega a adoptar medidas ante la grave crisis económica

El más visible contraste del discurso de 28 julio es el que separa la opinión de los analistas económicos en los comentarios previos, todos los cuales coincidían en que esperaban que el presidente explique lo que se propone hacer frente a la crisis económica mundial cuyos impactos están creciendo en el país, y el contenido del mensaje mismo para el cual no existe ningún punto de corte entre el momento en que se declara la crisis y los años previos de rápido crecimiento, lo que hace mezclar las cifras y los problemas, con un único resultado que es el de negarse a adoptar medidas ante la gravedad de la situación.

Para García el crecimiento de los años anteriores era un número que se podía convertir en un cartel presidiendo una reunión con empresarios, como hizo en enero, en pleno deterioro de los indicadores internos, cuando lanzó una de sus peroratas de estímulo y llamados al optimismo con un afiche que aludía al 9.8% del 2008. Lamentablemente los empresarios no reaccionaron a su entusiasmo y la inversión privada se derrumbó de una velocidad de 26% en año anterior, a 1% en el primer semestre del 2009, con tendencia a seguir bajando. Como sigue obsesionado en el guarismo final, el ministro Carranza le ha dicho que la única manera de evitar una catástrofe que acabe con las últimas reservas de fe en el modelo, es que el Estado sustituya a los privados con gasto propio en inversiones. Este es el motivo de la fórmula: gastar, gastar, como si el mundo se fuera a acabar.

García debía haber explicado los sectores que están siendo afectados directamente por la crisis y los deterioros macroeconómicos que está sufriendo el país y están desequilibrando el modelo. Esto para no pedirle que admita sus errores iniciales de soberbia ante un escenario que se tornaba adverso y la demora y confusión con que empezaron a elaborarse los planes anticrisis y de estímulo. ¿Qué fue de estas medidas? El discurso ni las menciona. En cambio se quejó una vez más de las morosidades burocráticas, y en un extremo de temeridad llegó a decir que se entregaría 2 mil millones de soles a unidades ejecutoras de base para que hagan obras por fuera de los municipios y las regiones. ¿Qué quiso decir? Acaso que pondrá cuentas en los bancos, que luego no podrán gastarse por ausencia de capacidad técnica y ejecutiva, o que esto es una farra y hay que quemar lo que le queda al fisco.

El problema es que la crisis no es un fenómeno parejo, que puede conjurarse con una mayor inversión en construcciones, porque eso no va hacer reaccionar a los mercados de exportación que estamos perdiendo (a pesar de la cantidad de TLC que hemos firmado) y que está provocando cierres y despidos en sectores como el textil y la agroindustria, ni va a modificar la tendencia decreciente de los precios de las materias primas que han sostenido el crecimiento previo, lo que está despriorizando los proyectos mineros. También surge la inestabilidad de los mercados financieros, que están representando pérdidas para las AFP y otros fondos sociales. La baja de recaudación del sector público, precisamente cuando se propone gastar y gastar. La inestabilidad monetaria, que erosiona las reservas, etc. ¿Qué dice García sobre esto? Nada. Pero aunque ya no se atreve a pronosticar cómo llegaremos a fin de año (que muchos estiman que será crecimiento cero), se proyecta al 2010 y 2011, con una supuesta recuperación al 6% para cada uno de esos dos años, sin decir en qué basa su apuesta.

Todo hace ver que la política de arengar a los privados para que se mojen en la crisis, bajo el supuesto que el Estado está poniendo de la suya y sin estorbarles (obras de construcción, no competitivas), se ha agotado, a pesar de la fuerte insistencia presidencial en el optimismo que mueve montañas. La idea de que el Perú llegará al 2021, al bicentenario de la independencia, como país del primer mundo, tampoco parece ser una palanca convincente, para que los capitales se arriesguen a perderlo todo en una crisis tan diluyente como la actual.

El becerro de oro de las inversiones tiene sus reglas y sus tiempos. Eso lo saben sus viejos adoradores. Mientras que los conversos recientes, como Alan García, suelen creer que la mera seducción de las palabras, puede alterar las duras reglas del capitalismo.

José Oscátegui: proyecciones de crecimiento son imposibles de cumplir debido a la crisis



Promesas que se quedarán en palabras. Para el catedrático de la Universidad Católica, José Oscátegui, la proyección presidencial que para el 2021 el Perú forme parte de las economías más desarrolladas, sonó más bien como que el presidente de la República, Alan García, le dijera a los millones de peruanos: ahora las cosas están mal, pero yo les prometo la tierra prometida para el bicentenario de la Independencia, el 2021. Sin embargo, para el analista, el presidente se olvidó que en dos años culmina su periodo y es poco lo que puede aportar para llegar a ese objetivo.


En ese sentido, indicó que el presidente no puede asegurar que en poco más de 10 años el Perú logre ingresar a formar parte de los países del primer mundo, así como –también proyectó el mandatario- que entre el 2010 y 2011 el crecimiento del país sea mayor de 6% del Producto Bruto Interno (PBI).


Por ello, recalcó que nuevamente el optimismo presidencial salió a relucir en el discurso por Fiestas Patrias, pues minimizó el impacto de la crisis económica en el país.


“La crisis internacional seguirá fuerte. Se prevé que los países desarrollados empezarían a recuperarse recién el próximo año, pero la recuperación será lentamente.”,dijo.


“Entonces, como la economía peruana depende de la recuperación de otros países desarrollados como Estados Unidos, la proyección presidencial de crecimiento es prácticamente imposible”, subrayó.


Ineficiencia estatal Referente a la intención gubernamental entregarles más recursos a las comunidades para que estas ejecuten obras en la zona, indicó que la medida demuestra la ineficiencia estatal y la incapacidad operativa del gobierno para ejecutar el presupuesto de manera eficiente y oportuna. Recalcó que transferir más recursos a las comunidades –e incluso a jóvenes entre 16 y 24 años- no garantiza un mayor avance en la ejecución de los recursos, pues estas personas carecen de conocimientos técnicos.


ROSA FLORIÁN: "Núcleos ejecutores anidaron corrupción"

SEÑALA QUE ESQUEMA YA FRACASÓ EN EL FUJIMORISMO



Las reacciones ante el mensaje presidencial siguieron mostrando un tono crítico y uno de los aspectos que estuvieron en el ojo de la tormenta fue el anuncio de delegar a las comunidades la construcción de obras públicas a través de los llamados "núcleos ejecutores".



La legisladora Rosa Florián (Unidad Nacional) señaló que esta modalidad ya se utilizó en el régimen de Alberto Fujimori y sirvió para anidar la corrupción que predominó en esos años."En el gobierno de Fujimori hubo muchos problemas de corrupción con los núcleos ejecutores porque el dinero que quedaba excedente era repartido entre los ingenieros que ejecutaban las obras. Además, la población recibía una obra, no le hacía mantenimiento y se destruía o quedaba abandonada", precisó.




YA LA PRESENTÓ



Florián recordó que dicha iniciativa ya había sido lanzada el 2008 ante un grupo de 40 alcaldes de centros poblados por el propio García, quien designó a Hernán Garrido Lecca, entonces ministro de Vivienda, para que dialogue con las autoridades locales.


"La propuesta del Presidente, enviada por escrito al Congreso, era diferente, pues sugería que sean los alcaldes de centros poblados quienes encabecen esos núcleos ejecutores, y no la población directamente, como lo plantea ahora", comentó Florián.


Explicó que para ello se aprobó en el Congreso la Ley 29030, la cual debió ser reglamentada por la Presidencia del Consejo de Ministros, pero eso hasta el momento no se ha hecho."La Ley 29030 establece en su primer artículo que para que se conformen los núcleos ejecutores se debe contar con la opinión previa de la municipalidad de los centros poblados existentes", indicó.


¿Foncodes o la Contraloría?


El presidente Alan García defendió ayer su propuesta de utilizar "núcleos ejecutores" para que la comunidad organizada lleve a cabo su propio proyecto. "Hay quienes se preguntan quién va a controlar a esa gente cuando le den los S/.500 mil para hacer la obra. Y yo digo: El pueblo. ¿Ustedes creen que los otros 100 en el asentamiento humano se van a dejar robar las bolsas de cemento? ¿Usted cree que el pueblo es tonto?", se preguntó. Agregó que la Contraloría también puede intervenir, pero como no va a poder verificar todas las obras, el Foncodes puede mirar. "Eso no es populismo", subrayó.




Manco Zaconetti: Las mineras no pagan las regalías

Especialista de la UNMSM responde a lo dicho por el mandatario en su discurso. Desde el 2004 a la fecha se ha perdido mil millones de dólares.


Uno de los puntos a resaltar dentro del discurso del presidente Alan García fue la exhortación que hizo a los empresarios mineros respecto al uso del Fondo Minero.

Sin embargo, en opinión del investigador de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Jorge Manco Zaconetti, esta llamada de atención se debe a la preocupación del gobierno por haberse comprometido a captar S/. 2,500 millones hasta el 2011 y como van las cosas (contexto internacional), el monto será menor.

“Hay un compromiso por obtener S/. 500 millones y las empresas que obtienen utilidades extraordinarias como Yanacocha o Barrick por el alto precio del oro y con lo que se debe ejecutar las obras que se han comprometido, sin embargo, ellas no pagan los montos que les corresponden en materia de regalías”, explica Zaconetti.

Y es que resulta sorprendente que mientras Newmont le paga una regalía privada a Yanacocha de US$ 2 o US$ 3 la onza, esta empresa no le pague nada al Estado.

“Existe una sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que exige a todas las empresas mineras el pago de regalías, pero lo que falta para que se cumpla es la voluntad del gobierno, que debe exigir el pago sin excepción”, sostiene.

Manco Zaconetti dice que desde el 2004 a la fecha se están perdiendo mil millones de dólares por este concepto, monto que funcionaría mucho mejor que el aporte voluntario. “El óbolo disminuye, en cambio, con el alza del precio del oro, recaudaríamos más”, dijo.


Para el experto, es positivo el anuncio de renegociar el abastecimiento de gas para el mercado interno pero eso no basta. Se debe renegociar las regalías de la exportación y de los demás lotes.




sábado, 25 de julio de 2009

Zelaya ingresó a Honduras

EL PARAÍSO, Honduras (Agencias).— El presidente de Honduras, Manuel Zelaya, ingresó brevemente a territorio hondureño en un gesto simbólico y luego retornó al lado nicaragüense, desde donde seguirá su esfuerzo para volver a su cargo.


Zelaya cruzó la línea divisoria desde el puesto nicaragüense de Las Manos, a donde regresó luego. “Temor no tengo, pero también tengo uso de la razón. Se puede producir violencia y no quiero ser la causa”, dijo a la cadena de televisión venezolana Telesur, al explicar las razones de su retorno. “Ellos están claros que no pueden gobernar con el pueblo en contra y un presidente exiliado... lo mejor es llegar a un entendimiento de respeto a la voluntad soberana del pueblo”, indicó a la CNN.


Zelaya, quien propuso al gobierno de facto y los militares iniciar un diálogo en territorio hondureño, cumplió así su anuncio de reingresar a Honduras. No pudo, sin embargo, llevar a buen término su intención de llegar a Tegucigalpa y retomar la Presidencia. Por su parte, el gobierno de facto de Roberto Micheletti tampoco cumplió su advertencia de arrestar a Zelaya al entrar al país.


Desde temprano, el gobierno de facto había preparado el escenario para la llegada de Mel: apostó al Ejército en la frontera con Nicaragua y ordenó un toque de queda de 18 horas en la zona, afectando a las provincias de El Paraíso, Choluteca y Olancho, además de Valle, que tiene frontera con El Salvador.


Los simpatizantes del líder defenestrado, que llegaron hasta la zona limítrofe para esperarlo, encontraron numerosos retenes militares y policiales en su camino. En algunos puntos se registraron disturbios y se reportaron dos personas con heridas de bala.
Además, en al menos dos oportunidades la policía dispersó con gases a un grupo de zelayistas en El Paraíso, donde un nutrido contingente de policías formó una barrera y lugar que Zelaya propuso para entablar las negociaciones.


Reprueban decisión


La pretensión de Zelaya de regresar por su cuenta también recibió críticas internacionales. La secretaria estadounidense de Estado Hillary Clinton calificó a Zelaya de “imprudente”, en tanto el secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, dijo que el líder debe volver, “pero no así”, sino pacíficamente. De igual forma, el presidente de Costa Rica, Óscar Arias, que ha mediado en el conflicto, dijo que ese “no es el camino para logar la reconciliación”.


En un comunicado leído por la vicecanciller de facto Marta Alvarado, el gobierno responsabilizó a Zelaya y a los presidentes de Nicaragua y Venezuela “por el irrespeto a la vida humana y las consecuencias que puedan derivarse” con la decisión del mandatario depuesto de cruzar a territorio hondureño.


Antes de llegar a la frontera, Zelaya había declarado a emisoras colombianas que no buscaba desencadenar una guerra civil con su retorno al país. Además, precisó que “con conocimiento de causa” podía afirmar que el gobierno de Barack Obama “ha apoyado la democracia y ha condenado fuertemente este golpe de Estado, no así otras fuerzas que hay en EU, que es un país de conflictos, de controversias internas, con una derecha extrema sumamente reaccionaria”.
Por su parte, el ministro de Defensa del gobierno de facto, Adolfo Sevilla, comentó a Radio Caracol que Zelaya debía esperar hasta después de las elecciones de noviembre para volver al país “por la puerta grande”.


En este contexto, Estados Unidos renovó su alerta de viaje para Honduras, en la que recomienda a sus ciudadanos que eviten visitar ese país, a no ser que sea necesario, por la profunda crisis que vive la nación centroamericana. Un vocero del Departamento de Estado dijo ayer que Zelaya prevé estar el martes de nuevo en Washington para “más conversaciones” sobre su situación.

miércoles, 22 de julio de 2009

Washington y el golpe de Estado en Honduras: aquí están las pruebas

Por Eva Golinger



La nueva diplomacia estadounidense, denominada "smart power" (poder
inteligente) ha jugado un papel principal antes, durante y después del golpe de
Estado en Honduras. Los voceros del Departamento de Estado, admitieron en una
rueda de prensa el 1 de julio, que tenían conocimiento previo del golpe y habían
estado trabajando con los sectores que lo planificaban para buscar "otra
solución".


TeleSUR _ 13/07/2009





· El Departamento de Estado tenía conocimiento previo del golpe.

· El Departamento de Estado y el Congreso de EEUU financiaron y asesoraron a los actores y organizaciones hondureñas que participaron en el golpe.

· El Pentágono entrenó, capacitó, financió y armó al ejército hondureño que perpetró el golpe y sigue reprimiendo al pueblo de Honduras.

· La presencia militar estadounidense en Honduras, que ocupa la base militar de Soto Cano (Palmerola), autorizó el golpe de Estado con su complicidad tácita y la negativa a retirar su apoyo a los militares hondureños.

· El embajador de Estados Unidos en Tegucigalpa, Hugo Llorens, coordinó la expulsión del poder del presidente Manuel Zelaya, junto con el subsecretario de Estado Thomas Shannon y John Negroponte, quien trabaja actualmente como asesor de la Secretaria de Estado Hillary Clinton.

· Desde el primer día del golpe, el gobierno de Washington ha hablado de las "dos partes" involucradas y la necesidad de un "diálogo" para restituir el orden constitucional, legitimando de esta forma a los golpistas.

· El Departamento de Estado se ha negado a calificar legalmente los sucesos de Honduras como un "golpe de Estado", no ha suspendido ni congelado su apoyo financiero y el comercio con el país, ni ha tomado medidas para presionar eficazmente al gobierno de facto.

· Washington manipuló a la Organización de Estados Americanos para alargar el tiempo de debate sobre lo que había que hacer y así no apoyar el regreso inmediato del presidente Zelaya al poder, como parte de una estrategia que sigue en pie y simplemente busca legitimar al gobierno de facto y desgastar al pueblo hondureño que todavía se resiste al golpe.

· La Secretaria de Estado Clinton y sus voceros dejaron de hablar del regreso del presidente Zelaya al poder luego de la designación de Oscar Arias, presidente de Costa Rica, como "mediador", y ahora califican al dictador que asumió el poder ilegalmente durante el golpe, Roberto Micheletti, como "presidente interino".

· La estrategia de "negociar" con los golpistas fue impuesta por el gobierno de Obama como una manera de desacreditar al presidente Zelaya -culpándolo por los hechos que provocaron el golpe- y legitimando a los golpistas.

· Congresistas estadounidenses -demócratas y republicanos- organizaron una visita de unos representantes de los golpistas de Honduras a Washington, a los que recibieron con honores en diferentes instituciones de la capital estadounidense.

· A pesar de que fue el senador republicano John McCain quien coordinó la visita de los golpistas a Washington a través de un bufete de lobby, The Cormac Group, actualmente es el abogado de Bill Clinton y amigo cercano de Hillary, Lanny Davis, a quien se ha contratado como "lobbista" para lograr la aceptación pública de Washington del gobierno de facto en Honduras.

· Otto Reich y el venezolano Robert Carmona-Borjas, quien fue abogado del dictador Pedro Carmona durante el golpe de Estado de Venezuela en Abril de 2002, ayudaron desde Washington a preparar el escenario para el golpe contra el presidente Zelaya en Honduras.

· El equipo de diseño del golpe de Estado en Honduras designado por Washington también incluía a un grupo de embajadores de Estados Unidos recientemente nombrados en Centroamérica, expertos en la desestabilización de la revolución cubana, y a Adolfo Franco, ex encargado del programa de Cuba de la USAID.

PARA QUIENES QUIERAN LEER MÁS SOBRE LOS DETALLES DE LA PARTICIPACIÓN DE WASHINGTON EN EL GOLPE, SIGUE

martes, 21 de julio de 2009

César Hildebrandt: Cómo toca esta orquesta

La orquesta del Tropicana de la era Batista está tocando a todo dar. Ha vuelto el danzón y ha vuelto la guaracha. Celia Cruz no se ha ido todavía a Miami y Benny Moré canta en el cabaret del hotel Riviera.

Y la orquesta toca. Toca en Honduras, con un payaso apellidado Micheletti. Toca en Washington, donde el gobierno de Obama -esa enorme decepción- acaba de señalar que el de Caracas es un régimen viciado por el narcotráfico (con lo que se pretende repetir la historia de Manuel Antonio Noriega, ese sirviente de la CIA que luego quiso ser autónomo y terminó con su Panamá ametrallada y con sus huesos en una cárcel de los Estados Unidos).


Toca bien la orquesta. No desafina. Toca en Irán, donde los triunfos electorales no se computan como válidos si el que gana se llama Ahmadineyad y sigue siendo un dolor de cabeza para los Estados Unidos y su portaaviones anclado en Medio Oriente, quiero decir Israel.


Y sigue tocando. Toca en Lima, donde el señor García, tercero en el escalafón de coristas de la Casa Blanca, acusa a Bolivia y Venezuela de armarle los líos que le arman, en realidad, sus propios desatinos.


Toca sus vientos y sus cueros en la media luna boliviana, en los territorios de la minoría uigur en China, en los círculos polacos que demandan la instalación de misiles atómicos dirigidos a la Federación Rusa.


Y toca ahora en Ecuador, donde, justo en el momento en que los estadounidenses tienen que largarse de su base militar en Manta, aparece un video en el que el Mono Jojoy, alto mando de las FARC, hablaría de la ayuda financiera brindada a la campaña electoral del presidente Correa.
He visto el video que fue entregado a la Associated Press. Lo he visto en RCN, la televisora colombiana, y es evidentísimo que está editado, sacado de contexto, manipulado hasta el descaro.
No sé si esa tarea la ha cumplido la Associated Press o la RCN, o el DAS, o el entorno colombo-estadounidense del señor Uribe. Y la verdad es que eso importa poco. Lo importante es que la tal “primicia” le cae como anillo al dedo al ajuste de tuercas que el señor Obama ha ordenado hacerle al mundo.


En Afganistán, por ejemplo, el señor Obama ha duplicado las fuerzas militares de los Estados Unidos, que ahora son más de 60,000 efectivos. Y las matanzas de civiles continúan en un escenario virtualmente sellado para la prensa. Y la respuesta a esa barbarie imperialista es la barbarie terrorista estallada en Indonesia. Porque, como sabemos, las guerras frías pueden poner al mundo incandescente.


Porque lo que pasa es que vivimos la segunda Guerra Fría de la historia. Con mejores relaciones públicas, con menos chusquedad, con más inteligencia, pero con casi las mismas armas y los mismos objetivos que los que tuvieron los Reagan y los Bush. El señor Obama ha revuelto todo para que nada cambie.


En el video que hoy pretende remecer al Ecuador -un sector de la oposición ya está demandando la renuncia de Correa- se ve al Mono Jojoy decir (o leer), ante una laptop, unas líneas que hablan de una contribución electoral para Correa. Pero hay tal corte de edición y tal malicia en la extracción quirúrgica que se ha hecho de ese momento, que no se sabe si Jojoy se está quejando de una calumnia o lamentándose de una supuesta infiltración.


Lo que no se puede admitir, por respeto a la inteligencia del público, es que Jojoy, que está en las FARC desde 1975 y que es uno de los más duros de su ala militar, haya grabado un spot anunciándole al mundo que Correa le debe mucho. ¿O será que el Mono Jojoy trabajaba para la CIA?


La orquesta no para de tocar. La fiesta es, como la de Peter Sellers, inolvidable. E interminable también.


Sube tensión en Honduras tras fracaso de negociación

Simpatizantes del presidente derrocado salían el lunes a las calles de Honduras a exigir su restitución alentados por el anuncio de Zelaya de que regresará al país en los próximos días, lo que avivó temores de que se desate la violencia tras el fracaso de las negociaciones en Costa Rica.


Reuters y Afp . Tegucigalpa. Las presiones internacionales contra el Gobierno hondureño interino aumentaron el lunes con la suspensión de la ayuda financiera de Europa y advertencias de observadores sobre un baño de sangre si no es restituido el depuesto mandatario Manuel Zelaya.


En tanto, simpatizantes del presidente derrocado salían el lunes a las calles de Honduras a exigir su restitución alentados por el anuncio de Zelaya de que regresará al país en los próximos días, lo que avivó temores de que se desate la violencia tras el fracaso de las negociaciones en Costa Rica.
La Unión Europea -que ya había retirado embajadores en Tegucigalpa- suspendió el lunes el envío de decenas de millones de euros en ayuda financiera al empobrecido país ante el naufragio de las conversaciones para instaurar a Zelaya al frente de un gobierno de unidad nacional, debido a la negativa del presidente interino Roberto Micheletti.

Con ello se sumó a Estados Unidos, que había suspendido programas de ayuda militar por 16.5 millones de dólares y amenazado con cancelar otros 180 millones; y al Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, que detuvieron créditos con un impacto estimado de 200 millones de dólares este año.

La comunidad internacional liderada por Naciones Unidas exige el retorno de Zelaya al poder, pero el Gobierno interino que asumió tras el golpe de Estado de hace tres semanas asegura que eso no es negociable.

Micheletti ha advertido que, si el mandatario derrocado pisa suelo hondureño, será arrestado para ser juzgado por varios cargos, entre ellos por supuestamente haber violado la Constitución al intentar hacer un referendo que abriera paso a la reelección presidencial.

Zelaya dijo que regresaría el fin de semana a Honduras debido al fracaso de las conversaciones del sábado y el domingo auspiciadas por el presidente costarricense, Oscar Arias.
Arias pidió 72 horas para hallar otra una solución y evitar lo que consideró un posible un "derramamiento de sangre".


Compás de espera

El rechazo a la propuesta formulada por Arias, premio Nobel de la Paz, profundizó el aislamiento internacional de las autoridades provisorias, repudiadas desde Washington hasta Caracas.
En un intento de evitar brotes de violencia, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, decidió el lunes "hacer un llamado a ellos (por los simpatizantes de Zelaya) y a todos a que demos las 72 horas que el presidente Arias ha planteado antes de sacar ninguna conclusión sobre este asunto".

Cientos de manifestantes pro Zelaya, muchos de ellos sindicalistas, protestaban el lunes frente al Congreso, rodeados de unos 150 soldados y policías antimotines.

"Aquí nadie se rinde, se está comenzando. Ahorita son protestas pacíficas, pero no se puede descartar que la cuestión llegue a males mayores", dijo Wilfredo Moncado, un líder sindicalista de 59 años que trabaja para una embotelladora.

Los partidarios del depuesto presidente planeaban paralizar el jueves y el viernes el país con una huelga general.

La policía hondureña advirtió que no toleraría que los manifestantes en Tegucigalpa se pasen de la raya y que actúen de "manera terrorista". Las autoridades interinas desplegaron soldados en distintos puntos del país ante el eventual regreso de Zelaya.

"Yo no creo que sea un buen camino el de la insurrección y el de la confrontación, pero creo que no lo vamos a evitar si no hay de parte del Gobierno de facto alguna flexibilidad", dijo Insulza a una radio chilena. "Eso va a ser un asunto complicado y yo espero que lo podamos evitar, pero la verdad es casi imposible evitarlo o hacer llamados a la calma cuando la dictadura pretende a vista y paciencia de toda la gente quedarse en el poder", agregó.Por su parte, el presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, declaró este lunes que no puede regresar al poder quien "rompió la Constitución", en alusión al depuesto Manuel Zelaya, y anunció que las elecciones no serán adelantadas y que seguirá en el poder hasta enero de 2010.

No puede volver al poder quien "rompió la Constitución de la República no una, sino varias veces", dijo Micheletti en un acto al que asistieron decenas de funcionarios y seguidores de su gobierno, quienes tomaron la palabra para fustigar a Zelaya.


Desafío para EU

El agotamiento de la vía diplomática supone un desafío para el Gobierno del presidente estadounidense Barack Obama, que apostaba por las negociaciones para restituir a Zelaya.
En cambio, el presidente venezolano, Hugo Chávez, un cercano aliado de Zelaya, acusó a Washington de estar tras el golpe de Estado y calificó como "blandas" las medidas tomadas por la comunidad internacional contra el Gobierno interino.


Zelaya, un empresario maderero, intentó regresar a Honduras el 5 de julio a bordo de un avión venezolano que no fue autorizado a aterrizar.

La operación terminó en tragedia cuando un joven cayó abatido por los disparos de soldados que custodiaban el aeropuerto de Tegucigalpa.

Pero también la consigna del Gobierno de facto parece ser resistir la presión internacional. ¿Cuánto? "Lo que sea necesario", dijo a Reuters el portavoz René Zepeda.

Analistas creen que la meta de Micheletti es llegar hasta las elecciones de noviembre, cuando esperan que un nuevo Gobierno les permita dejar atrás la página del golpe.


"El cálculo de ellos es que van a aguantar estos cuatro meses hasta las elecciones, claramente", dijo el analista Kevin Casas-Zamora, del Brookings Institution en Washington.



La Jornada en linea del 20 julio de 2009

lunes, 20 de julio de 2009

Declaración conjunta de partidos comunistas y obreros contra la resolución de la OSCE




No podemos permitir que nadie insulte la memoria de los antifascistas, participantes en la resistencia, que perdieron sus vidas en la lucha contra el nazismo.



La agudización del anticomunismo en Europa no es un fenómeno transitorio. Muestra el miedo de la clase dirigente ante la exacerbación de la crisis capitalista y de la urgencia de la exigencia de la abolición de la explotación capitalista y la necesidad de un cambio social fundamental.



Declaración conjunta de partidos comunistas y obreros



Condenamos firmemente la adopción, el 3 de julio de 2009, en una sesión ordinaria de la Asamblea Parlamentaria de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) celebrada en Vilnius (Lituania), de una nueva resolución anticomunista titulada “La reunificación de la Europa dividida”, que contiene una gran distorsión de la historia y niega el papel de la Unión Soviética en la victoria sobre el fascismo. La resolución iguala comunismo y fascismo. Quienes hacen tal cosa olvidan que fue la Unión Soviética quien hizo la mayor contribución a liberar Europa del fascismo. Los autores de la resolución – falsificadores de la historia – parecen haber olvidado quién entregó Checoslovaquia en 1939 en Munich, lo que llevó al fin de la independencia del país y a la esclavitud fascista de los pueblos checo y eslovaco.

Quienes votaron en favor de la adopción de esta resolución justifican de hecho, y alientan, una “caza de brujas” contra los comunistas en varios países de la OSCE en los que los comunistas son perseguidos, sus organizaciones juveniles prohibidas y los partidos encausados por el uso de sus símbolos tradicionales.

Es más, la resolución ofrece grandes oportunidades para la persecución judicial de la ideología comunista y la adopción de medidas contra los partidos comunistas.

Al mismo tiempo, somos testigos de la actual rehabilitación de los nazis en una serie de países, incluyendo el país que ha albergado esta sesión de la AP de la OSCE.

No podemos permitir que nadie insulte la memoria de los antifascistas, participantes en la resistencia, que perdieron sus vidas en la lucha contra el nazismo.

La agudización del anticomunismo en Europa no es un fenómeno transitorio. Muestra el miedo de la clase dirigente ante la exacerbación de la crisis capitalista y de la urgencia de la exigencia de la abolición de la explotación capitalista y la necesidad de un cambio social fundamental.

La clase obrera, todos los trabajadores, independientemente del grado de acuerdo o desacuerdo con los comunistas, deben rechazar firmemente a los portadores del anticomunismo, ya que la historia ha demostrado que los ataques anticomunistas preceden a la llegada de una ofensiva general contra los derechos sociales y democráticos del pueblo.

Respondamos a los provocadores y anticomunistas con nuestra lucha conjunta por los derechos de los trabajadores, por el socialismo.





1. Partido Comunista de Argentina


2. Partido Comunista de Armenia


3. Partido Comunista de Bangladesh


4. Partido Comunista de Bielorrusia


5. Partido del Trabajo de Bélgica


6. Partido Comunista de Brasil


7. Partido Comunista Británico


8. Nuevo Partido Comunista Británico


9. Partido de los Comunistas Búlgaros


10. Partido Comunista de Canadá


11. Partido Comunista en Dinamarca


12. Partido Comunista de Dinamarca


13. Partido Comunista de Finlandia


14. Partido Comunista Alemán


15. Partido Comunista de Grecia


16. Partido Comunista Obrero Húngaro


17. Partido Tudeh de Irán


18. Partido Comunista de Irlanda


19. Partido Obrero de Irlanda


20. Partido de los Comunistas Italianos


21. Partido Socialista de Letonia


22. Partido Comunista Libanés


23. Partido Socialista de Lituania


24. Partido Comunista de Luxemburgo


25. Partido Comunista de Macedonia


26. AKFM, Madagascar


27. Partido Comunista de Malta


28. Partido de los Comunistas, México


29. Partido Popular Socialista de México


30. Nuevo Partido Comunista de los Países Bajos


31. Partido Comunista de Noruega


32. Partido Comunista Peruano


33. Partido Comunista de Filipinas -PKP 1930


34. Partido Comunista de Polonia


35. Partido Comunista Portugués


36. Partido Comunista Rumano


37. Partido Comunista de la Federación Rusa


38. Partido Comunista Obrero de Rusia – Partido de los Comunistas de Rusia


39. Nuevo Partido Comunista de Yugoslavia


40. Partido de los Comunistas de Serbia


41. Partido Comunista de Eslovaquia


42. Partido Comunista Sudafricano


43. Partido Comunista de los Pueblos de España
44. Partido Comunista de España


45. Partido Comunista de Sri-Lanka


46. Partido Comunista de Suecia


47. Partido Comunista Sirio


48. Partido Comunista de Turquía


49. Partido Comunista de Ucrania


50. Unión de Comunistas de Ucrania

Se informará en próximos días de las nuevas adhesiones.




"BAJO LA BANDERA DE LENIN
HACIA LA VICTORIA "

domingo, 19 de julio de 2009

MARIÁTEGÜI : LA CRISIS MUNDIAL Y EL PROLETARIADO PERUANO *

EN esta conferencia —llamémosla conversa­ción más bien que conferencia— voy a limitarme a exponer el programa del curso, al mismo tiem­po que algunas consideraciones sobre la necesi­dad de difundir en el proletariado el conocimiento de la crisis mundial. En el Perú falta, por des­gracia, una prensa docente que siga con atención, con inteligencia y con filiación ideológica el de­sarrollo dé esta gran crisis; faltan, asimismo, maestros universitarios, del tipo de José Ingenie­ros, capaces de apasionarse por las ideas de re­novación que actualmente transforman el mun­do y de liberarse de la influencia y de los pre­juicios de una cultura y de una educación con­servadoras y burguesas; faltan grupos socialis­tas y sindicalistas, dueños de instrumentos pro­pios de cultura popular, y en aptitud, por tanto, de interesar al pueblo por el estudio de la crisis La única cátedra de educación popular, con espíritu revolucionario, es esta cátedra en forma­ción de la Universidad Popular. A ella le toca, por consiguiente, superando el modesto plano de su labor inicial, presentar al pueblo la realidad contemporánea, explicar al pueblo que está vi­viendo una de las horas más trascendentales y grandes de la historia, contagiar al pueblo de la fecunda inquietud que agita actualmente a los demás pueblos civilizados del mundo.


En esta gran crisis contemporánea el proletariado no es un espectador; es un actor. Se va a resolver en ella la suerte del proletariado mundial. De ella va a surgir, según todas las probabilidades y según todas las previsiones, la civilización proletaria, la civilización socialista, destinada a suceder a la declinante, a la decadente a la moribunda civilización capitalista, individualista y burguesa. El proletariado necesita, ahora como nunca, saber lo que pasa en el mundo. Y no puede saberlo a través de las informaciones fragmentarias, episódicas, homeopáticas del cable cotidiano, mal traducido y peor redactado en la mayoría de los casos, y proveniente siempre de agencias reaccionarias, encargadas de desacreditar a los partidos, a las organizaciones y a los hombres de la Revolución y desalentar y desorientar al proletariado mundial.


En la crisis europea se están jugando los destinos de todos los trabajadores del mundo. El desarrollo de la crisis debe interesar, pues, por igual, a los trabajadores del Perú que a los trabajadores del Extremo Oriente. La crisis tiene como teatro principal Europa; pero la crisis de las instituciones europeas es la crisis de las instituciones de la civilización occidental. Y el Perú, como los demás pueblos de América, gira dentro de la órbita de esta civilización, no sólo porque se trata de países políticamente independientes pero económicamente coloniales, ligados al carro del capitalismo británico, del capitalismo americano o del capitalismo francés, sino porque europea es nuestra cultura, europeo es el tipo de nuestras instituciones. Y son, precisamente, estas instituciones democráticas, que nosotros copiamos de Europa, esta cultura, que nosotros copiamos de Europa también, las que en Europa están ahora en un período de crisis definitiva, de crisis total. Sobre todo, la civilización capitalista ha internacionalizado la vida de la humanidad, ha creado entre todos los pueblos lazos materiales qué establecen entre ellos una solidaridad inevitable. El internacionalismo no es sólo un ideal; es una realidad histórica. El progreso hace que los intereses, las ideas, las costumbres, los regímenes de los pueblos se unifiquen y se confundan. El Perú, como los demás pueblos americanos, no está, por tanto, fuera de la crisis: está dentro de ella. La crisis mundial ha repercutido ya en estos pueblos. Y, por supuesto, seguirá repercutiendo. Un período de reacción en Europa será también un período de reacción en América. Un período de revolución en Europa será también un período de revolución en América. Hace más de un siglo, cuando la vida de la humanidad no era tan solidaria como hoy, cuando no existían los medios de comunicación que hoy existen, cuando las naciones no tenían el contacto inmediato y constante que hoy tienen, cuando no había prensa, cuando éramos aún espectadores lejanos de los acontecimientos europeos, la Revolución Francesa dio origen a la Guerra de la Independencia y al surgimiento de todas estas repúblicas. Este recuerdo basta para que nos demos cuenta de la rapidez con que la transformación de la sociedad se reflejará en las sociedades americanas. Aquellos que dicen que el Perú, y América en general, viven muy distantes de la revolución europea, no tienen noción de la vida contemporánea, ni tienen una comprensión, aproximada siquiera, de la historia. Esa gente se sorprende de que lleguen al Perú los ideales más avanzados de Europa; pero no se sorprende en cambio de que lleguen el aeroplano, el trasatlántico, el telégrafo sin hilos, el radio; todas las expresiones más avanzadas, en fin, del progreso material de Europa. La misma razón para ignorar el movimiento socialista habría para ignorar, por ejemplo, la teoría de la relatividad de Einstein: Y estoy seguro de que al más reaccionario de nuestros intelectuales —casi todos son impermeables reaccionarios— no se le ocurrirá que debe ser proscrita del estudio y de la vulgarización la nueva física, de la cual Einstein es el más eminente y máximo representante.


Y si el proletariado, en general, tiene necesidad de enterarse de los grandes aspectos de la crisis mundial, esta necesidad es aún mayor en aquella parte del proletariado, socialista, laborista, sindicalista o libertaria que constituye su vanguardia; en aquella parte del proletariado más combativa y consciente, más luchadora y preparada; en aquella parte del proletariado encargada de la dirección de las grandes acciones proletarias: en aquella parte del proletariado a la que toca el rol histórico de representar al proletariado peruano en el presente instante social; en aquella parte del proletariado, en una palabra, que cualquiera que sea su credo particular, tiene conciencia de clase, tiene conciencia revolucionaria. Yo dedico, sobre todo, mis disertaciones, a esta vanguardia del proletariado peruano. Nadie más que los grupos proletarios de vanguardia necesitan estudiar la crisis mundial. Yo no tengo la pretensión de venir a esta tribuna libre de una universidad libre a enseñarles la historia de esa crisis mundial, sino a estudiarla yo mismo con ellos. Yo no os enseño, compañeros, desde esta tribuna, la historia de la crisis mundial; yo la estudio con vosotros. Yo no tengo en este estudio sino el mérito modestísimo de aportar a él las observaciones personales de tres y medio años de vida europea, o sea de los tres y medio años culminantes de la crisis, y los ecos del pensamiento europeo contemporáneo.


Yo invito muy especialmente a la vanguardia del proletariado a estudiar conmigo el proceso de la crisis mundial por varias razones trascendentales. Voy a enumerarlas sumariamente. La primera razón es que la preparación revolucionaria, la cultura revolucionaria, la orientación revolucionaria de esa vanguardia proletaria, se ha formado a base de la literatura socialista, sindicalista y anarquista anterior a la guerra europea. O anterior por lo menos al período culminante de la crisis. Libros socialistas, sindicalistas, libertarios, de vieja data, son los que, generalmente, circulan entre nosotros. Aquí se conoce un poco la literatura clásica del socialismo y del sindicalismo; no se conoce la nueva literatura revolucionaria. La cultura revolucionaria es aquí una cultura clásica, además de ser, como vosotras, compañeros, lo sabéis muy bien, una cultura muy incipiente, muy inorgánica, muy desordenada, muy incompleta. Ahora bien, toda esa literatura socialista y sindicalista anterior a la guerra, está en revisión. Y esta revisión no es una revisión impuesta por el capricho de los teóricos, sino por la fuerza de los hechos. Esa literatura, por consiguiente, no puede ser usada hoy sin beneficio de inventario. No se trata, naturalmente, de que no siga siendo exacta en sus principios, en sus bases, en todo lo que hay en ella de ideal y de eterno; sino que ha dejado de ser exacta, muchas veces, en sus inspiraciones tácticas, en sus consideraciones históricas, en todo lo que significa acción, procedimiento, medio de lucha. La meta de los trabajadores sigue siendo la misma; lo que ha cambiado, necesariamente, a causa de los últimos acontecimientos históricos, son los caminos elegidos para arribar, o para aproximarse siquiera, a esa meta ideal. De aquí que el estudio de estos acontecimientos históricos, y de su trascendencia, resulte indispensable para los trabajadores militantes en las organizaciones clasistas.


Vosotros sabéis, compañeros, que las fuerzas proletarias europeas se hallan divididas en dos grandes bandos: reformistas y revolucionarios. Hay una Internacional Obrera reformista, colaboracionista, evolucionista y otra Internacional Obrera maximalista, anticolaboracionista, revolucionaria. Entre una y otra ha tratado de surgir una Internacional intermedia. Pero que ha concluido por hacer causa común con la primera contra la segunda. En uno y otro bando hay diversos matices; pero los bandos son neta e inconfundiblemente sólo dos. El bando de los que quieren realizar el socialismo colaborando políticamente con la burguesía; y el bando de los que quieren realizar el socialismo conquistando íntegramente para el proletariado el poder político. Y bien, la existencia de estos dos bandos proviene de la existencia de dos concepciones diferentes, de dos concepciones opuestas, de dos concepciones antitéticas del actual momento histórico. Una parte del proletariado cree que el momento no es revolucionario; que la burguesía no ha agotado aún su función histórica; que, por el contrario, la burguesía es todavía bastante fuerte para conservar el poder político; que no ha llegado, en suma, la hora de la revolución social. La otra parte del proletariado cree que el actual momento histórico es revolucionario; que la burguesía es incapaz de reconstruir la rique­za social destruida por la guerra e incapaz, por tanto, de solucionar los problemas de la paz; que la guerra ha originado una crisis cuya solución no puede ser sino una solución proletaria, una solu­ción socialista; y que con la Revolución Rusa ha comenzado la revolución social.


Hay, pues, dos ejércitos proletarios porque hay en el proletariado dos concepciones opuestas del momento histórico, dos interpretaciones distintas de la crisis mundial. La fuerza numérica de uno y otros ejércitos proletarios depende de que los acontecimientos parezcan o no confirmar su res­pectiva concepción histórica. Es por esto que los pensadores, los teóricos, los hombres de estudio de uno y otros ejércitos proletarios, se esfuerzan, sobre todo, en ahondar el sentido de la crisis, en comprender su carácter, en descubrir su signi­ficación.


Antes de la guerra, dos tendencias se dividían el predominio en el proletariado: la tendencia so­cialista y la tendencia sindicalista. La tendencia socialista era, dominantemente, reformista, so­cial-democrática, colaboracionista. Los socialis­tas pensaban que la hora de la revolución social estaba lejana y luchaban por la conquista gra­dual a través de la acción legalitaria y de la colaboración gubernamental o, por lo menos, le­gislativa. Esta acción política debilitó en algunos países excesivamente la voluntad y el espíritu revolucionarios del socialismo. El socialismo se aburguesó considerablemente. Como reacción contra este aburguesamiento del socialismo, tuvimos al sindicalismo. El sindicalismo opuso a la ac­ción política de los partidos socialistas la acción directa de los sindicatos. En el sindicalismo se refugiaron los espíritus más revolucionarios y más intransigentes del proletariado. Pero también el sindicalismo resultó, en el fondo, un tanto colaboracionista y reformístico. También el sin­dicalismo estaba dominado por una burocracia sindical sin verdadera psicología revolucionaria. Y sindicalismo y socialismo se mostraban más o menos solidarios y mancomunados en algunos países, como Italia, donde el Partido Socialista no participaba en el gobierno y se mantenía fiel a otros principios formales de independencia. Como sea, las tendencias, más o menos beligerantes o más o menos próximas, según las naciones eran dos: sindicalistas y socialistas. A este período de la lucha social corresponde casi íntegramente la literatura revolucionaria de que se ha nutrido la mentalidad de nuestros proletarios dirigentes.


Pero, después de la guerra, la situación ha cambiado. El campo proletario, como acabamos de recordar, no está ya dividido en socialistas y sindicalistas; sino en reformistas y revolucionarios. Hemos asistido primero a una escisión, a una división en el campo socialista. Una parte del socialismo se ha afirmado en su orientación social- democrática, colaboracionista; la otra parte ha seguido una orientación anti-colaboracionista, revolucionaria. Y esta parte del socialismo es la que, para diferenciarse netamente de la primera, ha adoptado el nombre de comunismo. La división se ha producido, también, en la misma forma en el campo sindicalista. Una parte de los sindicatos apoya a los social-democráticos; la otra parte apoya a los comunistas. El aspecto de la lucha social europea ha mudado, por tanto, radicalmente. Hemos visto a muchos sindicalistas intransigentes de antes de la guerra tomar rumbo hacia el reformismo. Hemos visto, en cambio, a otros seguir al comunismo. Y entre éstos, se ha contado, nada menos, como en una conversación lo recordaba no hace mucho al compañero Fonkén, el más grande y más ilustre teórico del sindicalismo: el francés Georges Sorel. Sorel, cuya muerte ha sido un luto amargo para el proletariado y para la intelectualidad de Francia, dio toda su adhesión a la Revolución Rusa y a los hombres de la Revolución Rusa.


Aquí, como en Europa, los proletarios tienen, pues, que dividirse no en sindicalistas y socialistas —clasificación anacrónica— sino en colaboracionistas y anticolaboracionistas, en reformistas y maximalistas. Pero para que esta clasificación se produzca con nitidez, con coherencia, es indispensable que el proletariado conozca y comprenda en sus grandes lineamientos, la gran crisis contemporánea. De otra manera, el confucionismo es inevitable.


Yo participo de la opinión de los que creen que la humanidad vive un período revolucionario. Y estoy convencido del próximo ocaso de todas las tesis social-democráticas, de todas las tesis reformistas, de todas las tesis evolucionistas.


Antes de la guerra, estas tesis eran explicables, porque correspondían a condiciones históricas diferentes. El capitalismo estaba en su apogeo. La producción era superabundante. El capitalismo podía permitirse el lujo de hacer sucesivas concesiones económicas al proletariado. Y sus márgenes de utilidad eran tales qué fue posible la formación de una numerosa clase media, de una numerosa pequeña-burguesía que gozaba de un tenor de vida cómodo y confortable. El obrero europeo ganaba lo bastante para comer discretamente y en algunas naciones, como Inglaterra y Alemania, le era dado satisfacer algunas necesidades del espíritu. No había, pues, ambiente para la revolución. Después de la guerra, todo ha cambiado. La riqueza social europea ha sido, en gran parte, destruida. El capitalismo, responsable de la guerra, necesita reconstruir esa riqueza a costa del proletariado: Y quiere, por tanto, que los socialistas colaboren en el gobierno, para fortalecer las instituciones democráticas; pero no para progresar en el camino de las realizaciones socialistas. Antes, los socialistas colaboraban para mejorar, paulatinamente, las condiciones de vida de los trabajadores. Ahora colaborarían para renunciar a toda conquista proletaria. La burguesía para reconstruir a Europa necesita que el proletariado se avenga a producir más y consumir menos. Y el proletariado se resiste a una y otra cosa y se dice a sí mismo que no vale la pena consolidar en el poder a una clase social culpable de la guerra y destinada, fatalmente, a conducir a la humanidad a una guerra más cruenta todavía. Las condiciones de una colaboración de la burguesía con el proletariado son; por su naturaleza, tales que el colaboracionismo tiene, necesariamente, que perder, poco a poco, su actual numeroso proselitismo.


El capitalismo no puede hacer concesiones al socialismo. A los Estados europeos para reconstruirse les precisa un régimen de rigurosa economía fiscal, el aumento de las horas de trabajo, la disminución de los salarios, en uña palabra, el restablecimiento de conceptos y de métodos económicos abolidos en homenaje a la voluntad proletaria. El proletariado no puede, lógicamente consentir este retroceso. No puede ni quiere consentirle. Toda posibilidad de reconstrucción de la economía capitalista está, pues, eliminada. Esta es la tragedia de la Europa actual. La reacción va cancelando en los países de Europa las concesiones económicas hechas al socialismo; pero, mientras de un lado, esta política reaccionaria no puede ser lo suficientemente enérgica ni eficaz para restablecer la desangrada riqueza pública, de otro lado, contra esta política reaccionaria, se prepara, lentamente, el frente único del proletariado. Temerosa a la revolución, la reacción cancela, por esto, no sólo las conquistas económicas de las masas, sino que atenta también contra las conquistas políticas. Asistimos, así, en Italia a la dictadura fascista. Pero la burguesía socava y mina y hiere así de muerte a las instituciones democráticas. Y pierde toda su fuerza moral y todo su prestigio ideológico.


Por otra parte, en el orden de las relaciones internacionales, la reacción pone la política externa en manos de las minorías nacionalistas y antidemocráticas. Y estas minorías nacionalistas saturan de chauvinismo esa política externa. E impiden, con sus orientaciones imperialistas, con su lucha por la hegemonía europea, el restablecimiento de una atmósfera de solidaridad europea, que consienta a los Estados entenderse acerca de un programa de cooperación y de trabajo. La obra de ese nacionalismo, de ese reaccionarismo, la tenemos a la vista en la ocupación del Ruhr.
La crisis mundial es, pues, crisis económica y crisis política. Y es, además, sobre todo, crisis ideológica. Las filosofías afirmativas, positivistas, de la sociedad burguesa, están, desde hace mucho tiempo, minadas por una corriente de escepticis­mo, de relativismo. El racionalismo, el historicis­mo, el positivismo, declinan irremediablemente. Este es, indudablemente, el aspecto más hondo, el síntoma más gravé de la crisis. Este es el in­dicio más definido y profundo de que no está en crisis únicamente la economía de la sociedad burguesa, sino de que está en crisis integralmen­te la civilización capitalista, la civilización occi­dental, la civilización europea.


Ahora bien. Los ideólogos de la Revolución Social, Marx y Bakounine, Engels y Kropotki­ne vivieron en la época de apogeo de la civiliza­ción capitalista y de la filosofía historicista y positivista. Por consiguiente, no pudieron prever que la ascensión del proletariado tendría que producirse en virtud de la decadencia de la civi­lización occidental. Al proletariado le estaba destinado crear un tipo nuevo de civilización y cultura. La ruina económica de la burguesía iba a ser al mismo tiempo la ruina de la civilización burguesa. Y que el socialismo iba a encontrarse en la necesidad de gobernar no en una época de plenitud, de riqueza y de plétora, sino en una época de pobreza, de miseria y de escasez. Los socialistas reformistas, acostumbrados a la idea de que el régimen socialista más que un régimen de producción lo es de distribución, creen ver en esto el síntoma de que la misión histórica de la burguesía no está agotada y de que el instante no está aún maduro para la realización socialis­ta. En un reportaje a La Crónica yo recordaba aquellas frases de que la tragedia de Europa es ésta: el capitalismo no puede más y el socialismo no puede todavía. Esa frase que da la sensación, efectivamente, de la tragedia europea, es la frase de un reformista, es una frase saturada de men­talidad evolucionista, e impregnada de la con­cepción de un paso lento, gradual y beatífico, sin convulsiones y sin sacudidas, de la sociedad individualista, a la sociedad colectivista. Y la his­toria nos enseña que todo nuevo estado social se ha formado sobre las ruinas del estado social precedente. Y qua entre el surgimiento del uno y el derrumbamiento del otro ha habido, lógica­mente, un período intermedio de crisis.


Presenciamos la disgregación, la agonía de una sociedad caduca, senil, decrépita; y, al mismo tiempo, presenciamos la gestación, la formación, la elaboración lenta e inquieta de la sociedad nueva. Todos los hombres, a los cuales, una sin­cera filiación ideológica nos vincula a la socie­dad nueva y nos separa de la sociedad vieja, de­bemos fijar hondamente la mirada en este perío­do trascendental, agitado e intenso de la histo­ria humana.








* Conferencia pronunciada el viernes 15 de Junio de 1923, en el local de la Federación de Estudiantes (Palacio de la Exposi­ción), con el título de "La Revolución Social en marcha a través de los diversos pueblos de Europa". Con el ti­tulo que aparece en esta recopilación se publicó en Amauta, Nº 30, Lima, abril-mayo de 1930, después de la muerte de José Carlos Mariátegui y cuando la histórica revista era dirigida por Ricardo Martínez de la Torre.




jueves, 16 de julio de 2009

Los Ponchos Rojos administran Correos de Bolivia

Un desafío para la Transparencia Indígena


(Datos & Análisis).- Aunque fue insólitamente minimizada por los propios medios oficiales de información, la decisión de los Ponchos Rojos de administrar la Empresa Boliviana de Correros (Ecobol) con una propuesta explícita de transparencia indígena en la gestión, ha generado una expectativa que guarda íntima relación con el futuro del proceso libertario que vive Bolivia. Si bajo este control indígena Ecobol desplaza del mercado postal a las empresas privadas de “courrier’s” y elimina la corrupción que se hereda en esta empresa pública desde los pasados regímenes neoliberales, los Ponchos Rojos se habrán reivindicado de aquella imagen canicida que espantó al país en noviembre del 2007.

El pasado jueves 13 de marzo fue una jornada significativa para el proceso de cambios revolucionarios que experimenta Bolivia bajo el gobierno de Evo Morales, el Presidente Indígena. La abogada aymara Amalia Morales Rondo, quien desempeña funciones en el sistema judicial desde hace 12 años, fue ascendida por el régimen al posesionarse como Jueza de Instrucción en lo Penal para la provincia de Yungas, constituyéndose en la primera magistrada “chola” (mujer mestiza de pollera) que registra la historia del país.

Posteriormente, el nuevo Ministro de Obras Públicas, Óscar Coca, posesionó a un profesional indígena ligado a la milicia de los Ponchos Rojos —el auditor financiero Marvel Vargas Ortiz— como el nuevo gerente general de la Empresa de Correos de Bolivia (Ecobol), hecho también muy significativo ya que incorpora en el aparato administrativo del Estado boliviano, de manera real, a la facción aymara más radical y consecuente que respalda al presidente Morales.

Sobre la primera posesión, la prensa reaccionó tal cual habitualmente lo hace en estos casos, mostrando a la jueza aymara como “otra pintoresca anécdota” de incorporaciones indígenas en la administración pública de Bolivia. Respecto a la entrega de Ecobol a manos de los Ponchos Rojos, los medios de comunicación privados alzaron grito al cielo criticando que el juramento del posesionado no fue ante la Biblia sino ante los mismísimos Ponchos Rojos, hecho calificado por algún periodista como “herejía”. Pero lo realmente insólito fue que los medios informativos del Gobierno, como ABI y Canal 7, minimizaron y prácticamente ocultaron la presencia de los milicianos indígenas en la posesión del nuevo gerente de Ecobol, incurriendo en una inadmisible desinformación.

Desiformación oficial

La crónica oficial de la posesión difundida por ABI se limitó, muy sucintamente, a reflejar un fragmento del discurso del ministro Óscar Coca y a un resumen del currículum del nuevo gerente de Ecobol, omitiendo deliberadamente detalles del acto central que consistió en el compromiso de los Ponchos Rojos para fiscalizar rigurosamente la gestión institucional que asume esta milicia indígena no armada. La labor de las autoridades informativas del Gobierno en este caso, devela la inconsistencia del aparato comunicacional estatal que incurre en actos de desinformación y manipulación al mismo estilo de regímenes pasados.

Los Ponchos Rojos arrastran una especie de “estigma” por un acto televisado el pasado 22 de noviembre, que consistía en ahorcar públicamente a indefensos perros como un modo simbólico de advertir al fascismo separatista que si los líderes de la “media luna” quieren derribar a Evo Morales por la fuerza, ahí estarán estas milicias aymaras oponiendo, a la violencia fascista, la violencia de una vanguardia indígena. Sin duda fue un error aquel acto canicida; causó estupor y justo repudio entre una mayoritaria opinión pública boliviana que clama por la pacificación del país. Pero es también de suponer que los Ponchos Rojos, revolucionarios como son, han sabido asumir autocríticamente aquel error y no hay indicio alguno de que se volverá a incurrir en tal exceso. Sin embargo, los encargados de la información oficial ejercen una censura contra este grupo, del mismo modo en que lo hacen los enemigos separatistas. El antecedente de los canes no es motivo valedero para omitir de las crónicas oficiales el hecho de que los Ponchos Rojos, al asumir control de la Empresa de Correos, asumen el reto de la Transparencia en esta gestión indígena. Minimizarlo desde los medios de comunicación del Gobierno, además de suponer escaso rigor periodístico en el tratamiento del tema, resulta un acto de prejuicio racista que es insólito se produzca dentro el propio Gobierno de Evo Morales. Algo está fallando en la Vocería Presidencial.

La ética indígena a prueba

Según la muy escueta crónica del conservador periódico La Razón, durante el acto de posesión de Marvel Vargas, los Ponchos Rojos le regalaron al ministro Coca un poncho y un “chicote”, este último “para castigar al nuevo gerente de Ecobol en caso de que no cumpla en forma adecuada con su gestión”.

Ese acto emblemático minimizado desde los propios medios gubernamentales, tiene un significado estratégico y trascendental para el proceso que se vive en Bolivia. Es primera vez que un grupo indígena organizado toma control directo de una repartición estatal en un ámbito administrativo enteramente institucional, de alcance nacional, con el explícito objetivo de imponer una gestión transparente.

La Empresa de Correos de Bolivia es una de las entidades más corrompidas de la administración pública. Fue durante décadas un “botín de pegas” del gonismo y el banzerismo, al extremo de que esta empresa fue utilizada para el tráfico de cocaína por narcotraficantes que militaban en el MNR, MIR y ADN, perdiendo eficiencia en su servicio y permitiendo que el mercado postal sea controlado por empresas privadas de “courrier”.

El ministro Coca anunció que Ecobol, bajo la nueva gestión controlada por los Ponchos Rojos, debe desplazar del mercado postal a las empresas privadas de “courrier” y brindar un servicio eficiente, moderno y accesible a la mayoría de la población boliviana, especialmente en las provincias y ciudades intermedias del país.

Aquel objetivo sólo puede ser alcanzado mediante una política radical de transparencia, donde la ética indígena que encarnan los Ponchos Rojos debe articulase con una institucionalidad que garantice racionalidad y eficiencia administrativa. Este modelo inédito en la gestión pública debe ser asumido por el Gobierno como un Proyecto Piloto de Transparencia Indígena con la eventualidad, en caso de ser exitoso, de replicarse en otras áreas estatales. Para ello, deberán los Ponchos Rojos contemplar las siguientes políticas de gestión institucional transparente:

1.- Apoyar a la Contraloría General de la República en su labor fiscalizadora, respetando la independencia de aquel organismo técnico en sus específicas competencias constitucionales.

2.- Involucrar a la Superintendencia del Servicio Civil para institucionalizar cargos y eliminar los índices de nepotismo, dentro una política de recursos humanos basada en los méritos profesionales y laborales, y no sólo en la militancia partidaria.

3.- Impulsar mecanismos de Autofiscalización en la Empresa de Correos de Bolivia, creando una Unidad de Fomento a la Transparencia y de Fortalecimiento Institucional bajo los principios indígenas de honestidad, respeto a las personas y ética de trabajo.

Con la aplicación de aquel programa mínimo de Transparencia, la presencia indígena en el aparato estatal, en este caso a través de los Ponchos Rojos, habrá producido una de las señales más importantes que espera la sociedad civil del régimen que preside Evo Morales.

………………………
Wilson García Mérida
Es periodista. Reside en Cochabamba.
llactacracia@yahoo.com


Ponchos Rojos, los soldados aymaras de Evo Morales


La revolución democrática y cultural que delineó Evo Morales para sus cinco años de gobierno en Bolivia tiene en los Ponchos Rojos (guerreros aymaras que tienen su centro de operaciones en Achacachi, pueblo ubicado en las riberas del lago Titicaca, unos 90 kilómetros al norte de La Paz) a sus celosos defensores.


Unos ponchos andinos de color rojo, tejidos a mano por las mujeres de Achacachi y comunidades aledañas, son su principal indumentaria.


El vestuario de esos guerreros aymaras se completa con "lluchu's" (gorro de lana con terminación cónica que cubre las orejas), chalina de color tierra, sombrero negro de piel de oveja de ala ancha para protegerse del sol y un pantalón de bayeta (tejido de lana de oveja) y abarcas (sandalias de llantas de motorizados) para los pies.


El arma más utilizada en más de cuatro siglos ha sido la "q'urawa" (una honda con piel de oveja) para lanzar piedras a velocidad y alta precisión.


Las piedras de pequeñas dimensiones, además de coca y alcohol, son llevadas en "ch'uspas" o bolsas de 20x20 centímetros que se cuelgan del hombro.


"Muchos usan hondas con piel de zorro para tener más precisión en sus lanzamientos", apuntó Jorge Huasco.


La reaparición de los Ponchos Rojos se produjo a mediados de enero en un desfile con motivo de celebrar los 181 años de fundación de la provincia paceña Omasuyos.


"Ponchos Rojos para defender la patria. Si antes han descuartizado al territorio nacional, han descuartizado a Túpac Katari; ahora ningún caballero va a poder nuevamente descuartizar a Bolivia", arengó el presidente Evo Morales, acompañado de su vicepresidente, Alvaro García Linera, y del comandante general de las Fuerzas Armadas, el general Freddy Bersatti.
En la marcha de Achacachi sobresalieron tres de ellos portando fusiles Máuser: dos eran hombres jóvenes cubiertos de gorras de lana, al estilo del mexicano subcomandante Marcos, y una mujer que conservaba el arma de su esposo muerto.


"Mi Hilario quería mucho a Bolivia porque eso aprendió cuando fue al cuartel", agregó doña Pacesa, una aguerrida mujer aymara.


El desfile de los Ponchos Rojos causó polémica en Bolivia. Hubo voces de aliento y críticas de diversos tonos.


"Nos parecen, en consecuencia, un tanto desproporcionadas las reacciones de temor ante los pocos e inservibles Máusers que cargaban al hombro algunos campesinos en el acto de Achacachi. Son meros testimonios de un pasado 'revolucionario' que ya están, repetimos, para el museo", apuntó el director del diario "El Deber" de Santa Cruz.


El alcalde de Achacachi, Eugenio Rojas, negó rotundamente que los Ponchos Rojos sean un grupo paramilitar o guerrillero. "Los Ponchos Rojos no son un grupo de disfrazados, son la identidad de la nación aymara", precisó.


Los Ponchos Rojos son, en su mayoría, ex soldados del ejército boliviano que conocen de estrategia y tácticas militares.


La preparación de algunos grupos se realiza en la planicie de K'ala Chaca ("puente de piedra" en aymara) y en el cerro Letanías de Viacha.


También son obligados a leer libros escritos por Fausto Reynaga, los que reivindican a los indígenas bolivianos y los instan a la toma del gobierno y del poder.


"Los fusiles Máuser fueron regalados a nuestros abuelos y padres por el presidente Víctor Paz Estenssoro para defender la Revolución Nacional de 1952", recordó Francisco Ramos de la subcentral de Warisata.


Agregó que los Ponchos Rojos son una herencia de sus antepasados, porque "defendieron la unidad y gobernabilidad de nuestros ayllus y comunidades".


Esteban Mamani, otro amauta (autoridad originaria) de Warisata, explicó que también existen ponchos de color negro, nogal, huayruru (rojo y negro) que son usados por autoridades originarias como Mallkus, Jilacatas y secretarios generales de los cantones vecinales.


El vicepresidente boliviano, Alvaro García Linera, tuvo vínculos en el anterior decenio con los Ponchos Rojos y con el Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK), que fue involucrado en atentados terroristas por lo que fue encarcelado junto a su hermano y al dirigente campesino, Felipe Quispe, llamado "Mallku" por sus seguidores.


García Linera a fines del año pasado pidió a los Ponchos Rojos sacar el fusil que tenían escondido bajo el poncho aymara. "Ese fusil debe ser usado para defender la unidad de Bolivia". Sus palabras sonaron como la explosión de una bomba en el oriente de Bolivia, donde se impulsa un proyecto autonómico que ganó en las urnas en cuatro de los cinco departamentos del país sudamericano.


La más reciente participación de fracciones de los Ponchos Rojos se remonta a octubre del 2003 en la llamada Guerra del Gas, que tuvo a El Alto, vecina ciudad a La Paz, como epicentro de una protesta social que forzó la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada a sus cinco años de mandato constitucional.


"La Guerra del Gas comenzó el sábado 22 de setiembre del 2003 con la muerte de cuatro personas en Warisata. Un grupo de los Ponchos Rojos, lanzando piedras (porque no había armas), hizo huir al ministro (de Defensa) Carlos Sánchez Berzaín en un helicóptero militar. Luego fuimos hasta El Alto para participar en las barricadas y marchas para pedir la renuncia de Goni", relató Lino Villca.
Pero la presencia de los Ponchos Rojos no sólo se dio en las movilizaciones campesinas sino que logró proyectarse hasta el actual gobierno de Evo Morales, el primer indígena que accede por voto directo a la presidencia de Bolivia.


"Nosotros tenemos participación en el equipo de ministros de Evo Morales. Ahora está David Choquehuanca que es ministro de Relaciones Exteriores. Antes estaba nuestro hermano Félix Patzi como ministro de Educación", precisó Juan Carlos Condori, secretario ejecutivo de la federación de campesinos de la provincia Omasuyos de La Paz.


Dijo que los Ponchos Rojos están dispuestos a devolver los fusiles Máuser a cambio de ganado o tierras. "Hay varias formas de devolver. Nadie puede dar nada gratis en este mundo. En esto se basa la reciprocidad: yo te doy algo y tú también, a cambio. Vamos a practicar el ayni comunitario, el trueque, en este tema de las armas".


Las autoridades de Achacachi, Warisata y otras comunidades del altiplano de La Paz han reiterado en los últimos días que son gente de paz.


"Sólo luchamos cuando hay injusticia o sometimiento. Hoy reaparecimos porque queremos que el gobierno de nuestro hermano Evo Morales no sea atacado por los ricos y la oligarquía boliviana que no quiere esta revolución democrática", agregó el alcalde Eugenio Rojas.

MARIO ROQUE CAYOJA
Leé algo más sobre los Ponchos Rojos: http://h1.ripway.com/achacachi/ponchorojo.htm#rojos

viernes, 10 de julio de 2009

Joven nativo busca a su padre desaparecido tras protestas en Bagua



Lima, 08/07/2009 (CNR) -- Lewis Wasum Tsamajai, de 17 años, viajó a Bagua Grande (Amazonas) desde la comunidad nativa de Galilea, en la provincia de Condorcaqui junto con su dos hermanos menores en busca de su padre, Nelvin Wasum Kasen, del que no tienen noticias desde el pasado 5 de junio.



“Quiero recuperar a mi papá y hasta ahora no lo consigo”, declaró Lewis Wasum a CNR. “Me dijeron que estaba muerto y me encaminé con mis hermanos, caminando ocho días, sin comer y sin tomar agua y durmiendo en la carretera. Hemos sufrido mucho”.



La tarde de ayer, Lewis recibió noticias de que su padre, identificado con DNI Nº 80619336, podría estar en la comunidad de San Pablo, en Condorcanqui, por lo que pidió ayuda a las autoridades para poder viajar y confirmar o descartar estas informaciones.



El padre de Lewis fue fotografiado por el diario local “Ahora” el pasado 8 de junio, mientras la policía lo bajaba de una camioneta policial para trasladarlo a la Deincri de Bagua Grande. Sin embargo, su nombre no figura entre las personas detenidas ni procesadas consignadas por la Defensoría del Pueblo. Tampoco en los listados de personas que regresaron a sus comunidades.
La desaparición de Nelvin Wasum Kasen no ha sido reportada en el informe de la Defensoría del Pueblo difundido el pasado viernes, que afirma que hasta el momento no existen desaparecidos.
“Dicen que se han regresado todos a su comunidad pero es mentira, en otras comunidades faltan personas”, manifiesta el joven Lewis, quien asegura que de Galilea partieron 39 comuneros para participar en el paro amazónico pero que hasta el momento sólo han regresado 32, por lo que existirían siete personas “no habidas”, entre ellas su padre.



Además, denuncia que en las comunidades awajún y huampis de Shapisa y Nazareth tampoco habrían regresado todos los comuneros. Lewis asegura que faltan siete comuneros en el caso de Shapisa y cuatro en la comunidad nativa de Nazareth (Imaza).



Según el informe defensorial, funcionarios de esta institución han visitado las comunidades de Galilea, Shapisa y Nazareth y las autoridades locales y los apus no han denunciado estas desapariciones.






Chile: Indígenas mapuche acusan a Gobierno de represión e incriminación terrorista

Servindi, 8 de julio, 2009.- Un centenar de “lonkos”, jefes políticos de las comunidades mapuches que viven en el sur de Chile, acusaron al Gobierno de reprimirlos policialmente y de aplicar la Ley Antiterrorista en su contra.



Así lo hicieron los manifestantes luego de que un grupo de carabineros les impidiera llegar hasta el Palacio de la Moneda para entrevistarse con la presidenta Michelle Bachelet. Durante la jornada de movilización los líderes mapuche, que llegaron anoche desde sus comunidades, lograron entregar una carta con reivindicaciones sobre sus tierras ancestrales al despacho presidencial.


Más adelante los pobladores indígenas indicaron que ofrecerán un plazo máximo de 15 días para recibir una respuesta a sus peticiones por parte del Ejecutivo antes de tomar nuevas medidas de protesta.“Entregamos la carta para hacer parte de que vinimos a dialogar para que no nos digan después nuevamente (que) el pueblo mapuche está haciendo actos terroristas”, sostuvo uno de los mensajeros de la comunidad, conocidos como “werken”.


Asimismo, señalaron no tener “audiencia fijada con la mandataria” y explicaron que trataron de establecer una cita por la vía de la intendencia de La Araucanía, en el sur del país, de la cual no recibieron “ninguna respuesta”.
De otro lado, el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, negó que haya existido represión policial en La Araucanía y afirmó que “no hay ninguna instrucción respecto a que la policía actúe de manera diferente a como actúa en el resto del país”.


En el sur de Chile se registran con frecuencia enfrentamientos entre hacendados y empresas forestales con indígenas que luchan por recuperar tierras que pertenecieron a sus antepasados.

sábado, 4 de julio de 2009

JORNADA DE LUCHA 8 JULIO 2009

FRENTE NACIONAL POR
LA VIDA Y LA SOBERANÍA

Jornada Nacional de Lucha: 8 de Julio
Paro Andino-Amazónico: 7, 8 y 9 de Julio

Luego de la histórica huelga amazónica y solidarios con los pueblos, comunidades, frentes regionales, organizaciones sindicales, sociales y de productores o trabajadores de servicios, en lucha a lo largo y ancho del país;

rechazando la gestión autoritaria y corrupta del Gobierno de Alan García, el incumplimiento de sus compromisos electorales, el continuismo y profundización de la política económica neoliberal y primario-exportadora en beneficio de las transnacionales y los grupos de poder y en contra de las mayorías nacionales, cuya protesta social persigue y criminaliza;

repudiando la continuidad impune del Gabinete Simon-Cabanillas-Araoz, responsable de los sangrientos sucesos de Bagua y de imponer la intransigencia del Presidente García frente a las justas demandas de los pueblos amazónicos en defensa de la consulta previa, sus territorios y derechos; así como el asesinato de un campesino en Chumbivilcas, Indignados con un Congreso que da impunidad política al gabinete actual pero se desentiende del fracaso del “Plan Anticrisis”, el alza del costo de vida y las demandas populares; que renuncia a nuestra soberanía y quiere dejar exportar el gas de Camisea sin importarle la necesidad energética del país; que, corroído por su propia corruptela, se calla ante la inaceptable liberación de Oscar Medelius y los responsables del fraude las firmas fujimoristas o la “detención domiciliaria” de lujo a León Alegría; hartos de la falsa democracia de un gobierno y un régimen político ilegítimos, que deciden las cosas de espaldas al pueblo, sin consulta, incumpliendo sus promesas electorales y la rendición de cuentas a la que los peruanos y peruanas tenemos derecho;Cansados de una política económica que profundiza la crisis, aumenta el costo de vida y el desempleo que sufrimos, impide el aumento de los salarios, sueldos y pensiones a pesar del aumento precios y de la pobreza, que privilegia a los ricos y las transnacionales, abandona al agro y la industria nacional, impide una Reforma tributaria para que paguen más los que ganan más y entrega el control del manejo y la renta que producen nuestros recursos naturales a capitales extranjeros;hastiados del racismo y la histórica marginación de nuestros pueblos y comunidades originarias, amazónicas y andinas, del atropello que sufren en sus mismos territorios;uniendo fuerzas por el cambio del régimen político y económico y por la conquista de un gobierno que responda a los intereses del país y de las mayorías, garantizando más justicia, democracia y libertad, más solidaridad y respeto a la pluriculturalidad;

EL FRENTE NACIONAL POR LA VIDA Y LA SOBERANÍA
REAFIRMA LA JORNADA NACIONAL DE LUCHA
DEL 8 DE JULIO Y EL PARO ANDINO-AMAZONICO
DEL PROXIMO 7, 8 Y 9 DE JULIO
exigiendo:

1.- Retorno al Perú de Alberto Pizango, líder amazónico y del Frente Nacional, con garantías y libertad, a encabezar la negociación con el Gobierno. No a la criminalización de la protesta social y persecución de los dirigentes sociales, populares y politicos que batallan por el cambio. Corte de juicio contra los dirigentes amazónicos, de AIDESEP, de los Frentes Regionales y gremios perseguidos y presos. Derogar los DL 982, 983, 988 y 989. Restitución de los 7 congresistas suspendidos. Fuerza de Ley al Convenio 169 de OIT y la Declaración de la ONU sobre Pueblos Indígenas.

2.- Inmediata renuncia del Gabinete Simon-Cabanillas-Araóz. Condenar el abuso, el autoritarismo, la violación a los derechos humanos y la corrupción del gobierno de Alan García y del régimen político, cada vez más ilegítimo y más repudiado. ¡Respeto a la dignidad y los derechos de los pueblos y a los hombres y mujeres del pueblo peruano!

3.- ¡Fin a la política economica neoliberal y primario exportadora, de sello antipopular y antinacional, que echa la crisis sobre los hombros de las mayorías empobrecidas, los trabajadores del campo y la ciudad, los pueblos originarios y sobre el agro y la industria nacional! Derogación de los DL para implementar el TLC con EEUU lesivos al país, de la Ley de Carrera Publica Magisterial que agrede los derechos del magisterio nacional, y las medidas contra los trabajadores de salud. Atender las justas demandas de los transportistas.

4.- Una política económica al servicio de la gente, un Estado que proteja los intereses e ingresos de las mayorías y de la producción nacional. ¡Basta de privatizaciones y entrega de nuestros recursos naturales, servicios y empresas publicas al negocio extranjero! ¡Protección al agro, las MYPES y la industria nacional en lugar de regalar el mercado interno a países extranjeros a través de los TLC! Suspender la aplicación de los TLC y la negociación de nuevos TLC, como el de la Unión Europea, por ser lesivos al país.

5.- Rebaja del costo de vida: Control de precios de los servicios públicos. Rebaja de la luz. No a la exportación del gas de Camisea. Ejecutar la inversión pública descentralizada comprometida. Programas de empleo de emergencia y reposición de despedidos. Aumento de sueldos, salarios y pensiones. Aumento del presupuesto de programas sociales, de salud y educación. Crédito y apoyo al agro. ¡Reforma Tributaria para que los ricos paguen más! Solución y atención a las demandas de las poblaciones y sectores sociales en lucha en todo el país. Declaración del agua como Derecho Humano.

7.- Cambio de régimen político, económico y social: Nueva Constitución y una Asamblea Constituyente de elección popular para construir un Estado Democrático y participativo, Descentralizado, Plurinacional y de Unidad en la Diversidad, con un nuevo pacto social por la justicia social y una economía al servicio de la gente, sobre el equilibrio entre naturaleza, sociedad y cultura y el reconocimiento de derechos colectivos de los pueblos; servicios públicos y derechos laborales y sociales.

¡ABAJO EL GOBIERNO DE ALAN GARCIA!

3 de Julio de 2009